Cómo funciona la colocación de implantes dentales y el cuidado posterior
Los implantes dentales se colocan en la mandíbula a través de un procedimiento quirúrgico menor. El paciente no siente nada durante el procedimiento debido a la anestesia, pero es esencial poder controlar la incomodidad, prevenir infecciones y asegurarse de que el implante pueda fusionarse correctamente con la mandíbula. La siguiente es una revisión de la colocación de implantes dentales y qué esperar durante y después del procedimiento de colocación.
Una revisión de los implantes dentales
Un implante dental es un poste de metal que se coloca en la mandíbula debajo o debajo de un diente faltante (o varios dientes faltantes). Sirven como ancla o raíz para un diente de reemplazo, que suele ser una corona para el reemplazo de un solo diente. No son removibles (a diferencia de las dentaduras postizas) y duran mucho más que las dentaduras postizas o los puentes fijos en promedio. También ofrecen beneficios de funcionalidad excepcionales, lo que permite al paciente comer como lo desea. Los pacientes también pueden cuidar sus implantes dentales de la misma manera que lo harían con los dientes naturales.
Primero hacemos una limpieza dental, luego curetajes y por último una fase de mantenimiento.
Qué esperar durante la colocación del implante
Antes de la colocación del implante, el paciente puede requerir un procedimiento de injerto óseo. Esto asegura que haya suficiente hueso en la mandíbula para soportar el implante. Una vez que la boca está lista, se programa el procedimiento de colocación del implante. Este procedimiento consiste en hacer una incisión en las encías, perforar un pequeño orificio en el hueso de la mandíbula y colocar el poste del implante dental en la mandíbula. Una vez que la boca cicatriza, se colocan el pilar y el diente de reemplazo.
Qué esperar después de la colocación del implante
El paciente no siente nada durante el procedimiento, pero normalmente hay dolor, hinchazón, sangrado leve y dolor después de la colocación del implante. El paciente puede manejar el dolor a través de analgésicos, siguiendo una dieta blanda y practicando una buena higiene oral. Por lo general, la boca tarda entre siete y 10 días en sanar, y el paciente puede volver a su actividad normal después. El implante debe pasar por la osteointegración, que se refiere al proceso de fusión del implante con la mandíbula. Esto toma de dos a seis meses.
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